Discurso opositor debe evitar el "patrioterismo" chavista

 Advierten que la MUD debe rechazar política exterior del Gobierno

El diputado Montoya respaldó a Pdvsa, al tiempo que cuestionó las alianzas de Chávez Ana María Otero/Archivo PEDRO PABLO PEÑALOZA |  EL UNIVERSAL viernes 27 de mayo de 2011  12:00 AM Toda la complejidad que encierra la sanción aplicada por el Gobierno de Estados Unidos contra Petróleos de Venezuela (Pdvsa), el chavismo la reduce a estas dos opciones: "o estamos con el Imperio o estamos con la patria venezolana". Puesto en esos términos ante la opinión pública, solo habría una opción posible. Sin embargo, detrás de ese mensaje "nacionalista", el oficialismo exige al país respaldar no solo al presidente Hugo Chávez sino también a su controvertida política exterior. En nombre de la Mesa de la Unidad Democrática, el diputado Julio Montoya (UNT-Zulia) rechazó el miércoles el castigo a Pdvsa y aclaró: "como demócratas, no apoyamos la política externa que mantiene este Gobierno y que esconde las relaciones con gente como Gadafi, Ahmadinejad, Mugabe, Lukashenko, Al Basshir y Al Assad, que masacran a sus pueblos cuando claman libertad". Luego, remató el parlamentario: "Que el Gobierno no vaya a convertir este tema de Pdvsa en una división entre quienes no la quieren y sí la quieren (...) el Gobierno tiene un discurso de soberanía, pero continúa regalando los recursos de todos los venezolanos al extranjero y consolidando una dependencia con otros países". Por otro lado, el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, reaccionó el miércoles a través de su cuenta en la red social Twitter: "Nuestro rechazo enérgico a las sanciones impuestas por el Gobierno de EEUU contra nuestra industria petrolera. Toda injerencia en asuntos internos de nuestro país es inaceptable". Después, agregó ayer: "No confundamos el petróleo y los ingresos de nuestro país que tenemos que defender con la nefasta gestión del Gobierno, su mala política internacional y sus aliados". En el filo de la navaja Al momento de evaluar la respuesta dada por la oposición en este caso, el politólogo Carlos Raúl Hernández destaca que el reto es "tratar de establecer un lenguaje común para enfrentar un problema complejo: cómo manejar los intentos patrioteros y antinorteamericanos de Chávez, así como su peligrosísimo juego en el esquema mundial, encubiertos en una mascarada de nacionalismo". Hernández advierte que para un político es difícil emitir un concepto que pueda ser interpretado como contrario a su país. No obstante, señala que la MUD no debe ceder ante el chantaje de Miraflores y tiene que "diferenciarse" claramente de la posición oficial. "Las cosas que hace Chávez en el plano internacional son extremadamente peligrosas", sostiene el académico, recordando los vínculos del Ejecutivo con Irán, nación que desarrolla un plan nuclear que ha sido condenado por las democracias avanzadas del planeta. "El Gobierno no puede pretender que los demócratas le hagamos el juego a una monstruosidad como esa", enfatiza Hernández, tras afirmar que la política exterior diseñada por Chávez "pone en peligro la seguridad de la República". En este escenario, el analista tiene claro el mensaje que debe enviar la oposición al pueblo: "Venezuela tiene que jugar con la comunidad democrática internacional, no con los enemigos de la humanidad". ppenaloza@eluniversal.com